Cenando en pasadizos. La bodega de los secretos

En la calle San Blas del Barrio de las Letras de Madrid, una discreta puerta señalada con un sencillo cartel que pone “restaurante” y dos bolardos vegetales, no nos hace sospechar lo que encontraremos en su interior.

Nada más acceder al local nos topamos con una escalera que desciende al espacio que da nombre a este peculiar establecimiento: La Bodega de los Secretos. Y es que el restaurante al que os invitamos hoy, se encuentra en una galería abovedada con cuatro siglos de historia cuyas paredes han sido testigos de los secretos e historias allí acontecidas. 

El restaurante se encuentra en una galería abovedada con cuatro siglos de historia cuyas paredes han sido testigos de los secretos e historias allí acontecidas. 

A principios del siglo XVII, en un Madrid rodeado por campos de cultivo, se construyó una primera galería que permitía conseguir las condiciones de temperatura idóneas para la crianza del vino de la zona. Posteriormente los monjes de la orden de San Felipe Neri, ampliaron la bodega dotándola de galerías llenas de hornacinas, cúpulas, arcos y pechinas ornamentadas. Más tarde, hacia 1808, se cree que estas cuevas sirvieron como escondite y refugio a los madrileños que se ocultaban durante la invasión de las tropas napoleónicas. Durante la guerra civil también fue empleada como refugio. En la restauración de la bodega aparecieron 3 pasadizos clandestinos, dos de ellos comunicaban con las afueras de la ciudad y muy probablemente se utilizaron para introducir mercancías y evitar el pago de los impuestos. Con estos datos, las historias y anécdotas allí acontecidas, las dejamos a vuestra imaginación. 

Esta bodega del siglo XVI, tras un magnífico trabajo de rehabilitación, ha sido convertida en un espacio perfecto para una velada especial. En las hornacinas donde descansaba el vino se han creado un conjunto de “semireservados” en los que se sitúan las mesas transmitiendo una sensación única de privacidad. La decoración de cada una de ellas es diferente por lo que la experiencia será única. 

En las hornacinas donde descansaba el vino se han creado un conjunto de “semireservados” en los que se sitúan las mesas transmitiendo una sensación única de privacidad.

La carta del restaurante ofrece una selección de platos de cocina mediterránea a los que se les ha añadido algún toque de vanguardia, que contiene además de unos entrantes variados, una selección de arroces y pastas, y como platos principales carnes y pescados. Cuentan con un menú degustación por 39 €, a los que se le pueden sumar 15 € más si quieres maridaje de 4 vinos, pero nosotras decidimos ir a carta. Nos pedimos dos entrantes para compartir y un principal por cabeza. Antes de comenzar nos trajeron un aperitivo en forma de dos pequeños cuencos de gazpacho que sirvieron para abrir boca y refrescarnos. Como entrantes pedimos un ceviche de pescado blanco, guacamole, leche de coco y mango (18 €) y media de croquetas caseras de jamón ibérico (6 €) para probar. Las croquetas estaban buenísimas, muy cremosas y sabrosas, pero sentimos no poder decir lo mismo del ceviche, que más que leche de tigre llevaba puro zumo de limón (esto nos pasa por pedir las cosas que no debemos en donde no debemos). Como principales Confit de pato glaseado con gnoquis de manzana y chalota caramelizada (19 €) y Solomillo de ternera con salsa de moixernons y hongos glaseados con orejones (25 €). Las dos carnes estaban buenas, tiernas y jugosas y con las guarniciones muy bien cocinadas. De postre nos tiramos a por nuestro clásico, una tarta de queso semitemplada (6,50 €) que estaba también bastante buena. La cuenta total para dos personas, incluyendo una botella de Luar do Sil, fue de 103 € . 

En conclusión, La bodega de los secretos es uno de los sitios especiales a los que ir a cenar si te apetece gozar de un ambiente íntimo y tranquilo en un lugar cargado de historia y con un toque mágico. La comida está bien, el servicio es excelente, el precio nos parece adecuado dado el espacio del que se trata. Un restaurante perfecto para sorprender a alguien a quien dedicarle una velada especial. 

Por cierto, si os interesa conocer más la parte histórica de esta espectacular bodega os recomendamos este artículo.

Plural: 2 Comentarios Añadir valoración

  1. joshua67 dice:

    No lo conocía y realmente es un lugar único dentro de toda la variedad de restaurantes que puedes encontrar en Madrid.
    Muchas gracias por compartir este lugar.

    1. Hola Joshua, muchas gracias a ti por tu comentario. Es un lugar muy especial y lleno de historia. Nos alegramos de habértelo podido descubrir. Cuéntanos tu experiencia si vas!

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