Hablar de Pedro Almodóvar es hablar de cine español, del de verdad, de ese que se expresa de una forma tan única como de aquí. Sus películas son un verdadero reflejo de las costumbres e idiosincrasias de un país y de una profesión, la cinematográfica, en la que el manchego, y ex trabajador de Telefónica, ha ido creando un mundo irreal y colorido pero cercano y reconocible por todas. Estos días Almodóvar ha presentado su último trabajo ‘Extraña forma de vida’, un corto de 31 minutos en el que nos ofrece su particular versión del western americano, pero con todas las señas de identidad del director (de nuevo… de aquí). 

El pasado 5 de Junio Madrid se despertaba lluvioso y con otro de los grandes pufos de la Comunidad inundado. Se cancelaron conciertos, se reprogramaron citas y así, sin el ruido mediático de las grandes producciones (y sin cortar calles), el MK2 Cines Paz presentaba a Pedro Almodóvar en su sala principal. Las butacas estaban repletas y el aplauso fue ensordecedor para recibir a uno de los mejores directores del país. Él, con una sudadera y deportivas, comenzó a explicar su “película” de 31 minutos con la pasión y humildad de quien sigue haciendo lo que le gusta, como le gusta y cuando le apetece.

‘Extraña forma de vida’ es un western rodado en Almería, en el decorado que construyó Sergio Leone para rodar sus películas y en el desierto de Tabernas. Durante 31 minutos nos cuenta la historia de dos amigos, Silva y Jacke, antiguos bandidos y pistoleros, que disfrutaron de su amor durante las pillerías de su juventud. Veinticinco años después, ambos vuelven a encontrarse, con otras vidas, con otras preocupaciones, pero aún compartiendo ese amor y pasión de la adolescencia, del que tuvieron que olvidarse por la incomprensión de la sociedad del momento. No, no es un ‘Brokeback Mountain’ en el oeste y la historia evoluciona y se complica por momentos, dejando al espectador con ganas de más. 

La cinta se estrenó en la sección oficial del Festival de Cannes y está protagonizada por Pedro Pascal y Ethan Hawke, pero el verdadero personaje es Almodóvar. Volvemos a ver los colores y su interesante, y siempre sorpresivo, manejo de la composición de escenas. Desde la vestimenta de los protagonistas a todo el uso y colocación del decorado, el Western americano es más “español” que nunca, pero sin olvidarse de todos aquellos planos míticos que Ford y Leone instauraron como canon en el género. 

Los dos actores principales están espléndidos en sus papeles y la historia explica todo lo que quiere contar en el corto tiempo del que dispone, pero, como decíamos, se hace corto. Tal vez sea por que queremos ver a estos dos actorazos en pantalla o que tanto la historia como el mundo que les rodea se nos queda pequeño. Lo cierto es que tras varias tentativas de Hollywood para llevar al manchego a su territorio, este corto parece ser la presentación oficial del director en la “cuna del cine moderno”. Según nos contó en la charla de presentación, ha intentado hacer un western puro y se ha cortado de mezclar géneros para que no le puedan achacar algún instrusismo en un producto tan puramente americano como el del lejano oeste. Pero Almodóvar también deja claro que es un director ecléctico y tanto su arte, como su visión del mundo mezcla tiempos, imágenes y sonidos. Así, el fado de Amalia Rodrigues que da comienzo a la cinta y que le da nombre al corto, es todo una declaración de intenciones y que sugiere que “no hay existencia más extraña que aquella que se vive de espaldas a tus propios deseos”.

‘Extraña forma de vida’ se estrenó en cines el pasado 26 de mayo en cines y saltará pronto a las pantallas americanas. Ha tenido críticas dispares en la prensa especializada, pero como en De Cines y Cenas tenemos verdadera devoción por Almodóvar, os recomendamos lo que parece ser el inicio de una nueva etapa en el director manchego. Un corto que dará que hablar en el futuro y que conviene verlo ahora que aún puede disfrutarse sin los concienzudos análisis de los que lo analizarán cuando sea nominado a los Oscar.

Aprovechamos para terminar este post, como terminó Almodóvar su presentación, con una frase que desató un caluroso aplauso: «el 23J id a votar»